Prueba nº 7. En 3º de la EOI.

Pleno julio alicantino. 4.30h de la tarde. 40 grados.
Vestía unas bermudas estampadas y una camiseta blanca. Ni largo, ni corto. Ni discreta, ni llamativa. Apropiada para el momento y si había alguna duda me confirmé al llegar.


Me esperaba una chica, de mediana edad. Vestida como ‘’de estar por casa’’.
Tuve suerte, no iba sola. Así, los nervios y la tensión se hacían más llevaderos, y la entrevista más dinámica (gracias Alberto).
Un curriculum simple, en comparación a cómo lo prepararía ahora. Quizás también poco enfocado a la entrevista y al puesto de trabajo.
Tras conversar un rato, llegó el momento: what are you doing this morning? Uff! Hasta aquí hemos llegado, pensé. Como pude me solté a decirle mis 4 ''englishismos todoterreno''.



Acabó la entrevista, y sinceramente, si hubiera sido la empleadora y según los requisitos que pedía, me llega alguien como yo llegué, dudo que le hubiera contratado. Era un puesto que necesitaba mucho conocimiento de idiomas y una formación de animación hotelera muy concreta.
Acabé contenta porque por lo menos lo intenté. Mi curriculum está en proceso de modificación creativa y ahora estoy asistiendo a 3º de la Escuela Oficial de Idiomas.
Aún me quedan otros tres cursos, pero no dejaré de intentarlo.